Datos de inversión pública en infraestructura económica en América Latina y el Caribe
El objetivo de este proyecto es medir las inversiones en infraestructura en los países de América Latina y el Caribe, reportar su valor, difundir los resultados y promover el análisis de sus impactos.
Se trata de recopilar, tratar y validar los recursos destinados a la infraestructura económica (agua y saneamiento, defensa contra inundaciones, energía, riego, telecomunicaciones y transporte) para realizar análisis y estudios.
La tarea, que tuvo su inicio en el año 2011, está siendo expandida y profundizada en forma conjunta por BID, CAF y CEPAL, instituciones multilaterales profundamente comprometidas con el desarrollo de los países de la región.
EL BID es un organismo multilateral que trabaja para mejorar la calidad de vida en América Latina y el Caribe. Con una historia que se remonta a 1959, ofrece préstamos, donaciones y asistencia técnica, y realiza investigaciones, con el objetivo de mejorar la calidad de vida en América Latina y el Caribe. EL BID tiene como prioridades reducir la pobreza y la desigualdad social, fomentar la cooperación e integración regional, promover el desarrollo a través del sector privado y abordar el cambio climático, la energía renovable y la sostenibilidad ambiental.
CAF es un banco de desarrollo constituido en 1970 y conformado por 21 países – 19 de América Latina y el Caribe, España y Portugal- y 13 bancos privados de la región. Promueve un modelo de desarrollo sostenible, mediante operaciones de crédito, recursos no reembolsables y apoyo en la estructuración técnica y financiera de proyectos de los sectores público y privado de América Latina.
La CEPAL fue establecida en 1948 como una de las cinco comisiones regionales de las Naciones Unidas. Sus objetivos son el de contribuir al desarrollo económico y social de América Latina y el Caribe, coordinar las acciones encaminadas a su promoción y reforzar las relaciones económicas de los países entre sí y con las demás naciones del mundo. Desde sus inicios, los servicios de infraestructura han sido uno de los aspectos claves de la contribución de la CEPAL a la región.
El conocimiento del nivel de inversión en infraestructura en América Latina y el Caribe constituye información de base utilizada para establecer prioridades, programar inversiones, analizar efectos y propiciar el uso productivo de recursos que tienen un alto potencial de impacto en el desarrollo. Desde esa perspectiva, los datos presentados por INFRALATAM pueden ser considerados como un bien público regional.
Se trata de un bien público porque los datos están disponibles para todos, y el uso por unos no substrae el uso por parte de otros; es una actividad de la que se benefician numerosos usuarios y la coordinación entre agencias multilaterales evita la duplicación de esfuerzos.
Es regional porque la acción colectiva a escala regional aporta valor añadido a las intervenciones nacionales. El enfoque regional facilita la adopción de mejores prácticas en la generación y divulgación de información sobre inversiones en infraestructura.
La naturaleza de bien público regional se respalda con la participación de entidades multilaterales como el BID, CAF y CEPAL, comprometidas con el desarrollo de América Latina y el Caribe. A su vez, la presencia de dichos organismos brinda un compromiso hacia la búsqueda de la calidad y la confiabilidad de la información, atento a la amplia experiencia que ellas tienen en el desarrollo de indicadores regionales. Esa garantía se potencia al actuar las tres instituciones en forma conjunta.
La infraestructura es un factor clave para el desarrollo sostenible de los países y la calidad de vida de las personas. Existe un consenso generalizado al respecto, y de hecho los proyectos de infraestructura constituyen un pilar central en la agenda de los organismos que impulsan esta iniciativa. Al mismo tiempo, para maximizar el impacto de las inversiones en infraestructura, es necesario no sólo invertir más, sino invertir mejor.
A pesar de ello es notable la falta de información sobre la inversión en infraestructura en la región. Los datos que esta iniciativa entrega son de gran utilidad para establecer cuál es el nivel de inversión necesaria, orientar la asignación de recursos públicos, establecer prioridades programar proyectos, inducir la participación privada y permitir un seguimiento del avance de la dotación de infraestructura de los países de la América Latina y el Caribe. También constituye una base imprescindible para analizar la productividad de la inversión en infraestructura, sus interrelaciones y efectos en el crecimiento económico, y su papel en el desarrollo sostenible y la calidad de vida de la población.
Los principales usuarios de las mediciones serán las entidades responsables de las políticas públicas y la planificación de los países de la América Latina y el Caribe, y también numerosos actores públicos, privados e internacionales como inversores privados, académicos, constructores, proveedores de equipos, organizaciones de la sociedad civil y otros.
La iniciativa INFRALATAM desea expresar su profundo agradecimiento a las personas, puntos focales e instituciones de los países de América Latina y el Caribe, que de diferentes maneras han contribuido a su construcción, entregando de manera profesional y desinteresada sus valiosos aportes, sugerencias y conocimientos sobre el tema.
Entre los trabajos pioneros en la materia, se destaca el de César Calderón y Luis Servén, quienes entregaron estudios muy valiosos sobre las inversiones en infraestructura en América Latina, dando cobertura a seis países de la región desde 1980 hasta 2006.